La profesionalidad, la responsabilidad y el compromiso no están reñidos con disfrutar al máximo de lo que hacemos.
Desarrollamos relaciones personales y reales con todas con las personas con las que trabajamos en el día a día.
Todo empieza por cuidar a las personas de nuestro equipo ofreciéndoles las mejores condiciones laborales posibles y un entorno donde poder desarrollar al máximo su carrera profesional.
Nos importa cómo hacemos las cosas pero lo que más nos importa son las personas con las que las hacemos. No somos recursos y apostamos por relaciones reales y personales que van más allá de lo profesional. Priorizamos la felicidad de las personas por encima de la pasta.
Cada persona debe tener la libertad y la autonomía suficiente para modelar el trabajo como quiera de forma que pueda sentirse orgulloso de lo que hace y desarrollar su máximo potencial. Hazlo como quieras pero con responsabilidad y sin excusas.
Lo más importante es el equipo y no permitimos que nadie se sienta solo. Nos dejamos de héroes y medallitas individuales y creemos que la mejor forma de crecer y de llevar a cabo nuestro trabajo es hacerlo juntos, colaborando y en equipo. Nadie es más importante que el equipo.
Nos importa cómo hacemos las cosas y la calidad y el detalle no son negociables. Esto aplica para todo lo que hacemos dentro y fuera de la empresa. Buscamos gente con esta mentalidad y que quiera hacer las cosas bien, con calidad. Nada de chapuzas, lo que hacemos vamos de cabeza a hacerlo bien.
No solo con nuestros clientes sino también con todas las personas del equipo. Buscamos gente para 540, no para proyectos concretos y desde el primer día hacemos una apuesta a largo plazo para que 540 sea su sitio hasta cuando cada persona quiera.
Queremos estar en sitios donde veamos que podemos hacer las cosas como nosotros creemos y que nuestro trabajo tiene un impacto real. No somos unos mandados, nos gusta aportar.